La modelo Elvira Floría me propuso el reto de hacer con ella una sesión de fotografía deportiva.
Lleva bastante tiempo trabajando su cuerpo -y mente- para obtener los resultados que podéis comprobar en las fotos. Si a ello le unimos mi interés por desenvolverme en campos que no conozco, la confluencia de circunstancias para abordar este trabajo lo hacían bastante irresistible.
Hay una frase que dice que todo sufrimiento tiene su recompensa. A pesar de que la hayamos oído mil veces, en esta ocasión adquiría su más pleno significado, tanto por parte de la modelo como por la de un servidor.
El objetivo de la sesión era mostrar los resultados de su duro trabajo, tanto en el gimnasio como en casa (sin una buena alimentación y unos buenos hábitos no hacemos nada). Para ello jugamos con la iluminación que nos ofrecía el centro deportivo Dreamfit Zaragoza, a la que añadimos un par de puntos de luz con los que buscamos acentuar y remarcar la musculatura del cuerpo de la modelo. También he limitado en lo posible la presencia de elementos de fondo para fijar como centro de atención a Elvira.
Para aprovechar el tiempo y obtener una mayor variedad de fotografías jugamos con varios estilismos, así como con las diferentes zonas que nos ofrecía el espacio.
Esperamos que os gusten los resultados.
En esta ocasión le he pedido a la modelo un pequeño comentario acerca de su trabajo, ya que creo que nos puede ayudar a comprender mejor el contenido de las imágenes:
Creo que uno de los motivos por los que Ángel y yo congeniamos es porque nos gusta tomarnos nuestras sesiones igual de en serio. A ambos nos gusta dedicarle tiempo a la preparación previa y en este caso, se podría decir que por mi parte llevaba preparando esta sesión ¡año y medio!
Siempre me ha gustado hacer deporte, llevo toda mi vida practicándolo. Me apunté al primer gimnasio con 14 años y desde entonces no he parado. El deporte te ayuda a desconectar y te aporta salud, te hace sentir más ágil y más fuerte, por no hablar de esa sensación tan placentera al terminar un buen entreno en el que te has dejado la piel. Y es que este deporte se trata de eso, de dejarse la piel en cada entreno. Es un estilo de vida que exige mucho esfuerzo, constancia y sacrificio y no sólo en el gimnasio, sino las 24 horas del día, ya que la alimentación es otro pilar fundamental para construir músculo.
Es un camino lento y con momentos muy duros, pero el ir viendo semana a semana tus progresos te hacen seguir adelante luchando por tu objetivo. No sólo creces desde el punto de vista físico, es un trabajo que también te hace crecer como persona, ya que muchas veces tienes que sacar fortaleza mental para seguir adelante, para no venirte abajo ante una lesión, para dejar de lado todo el cansancio y volver a entrenar al 100%, para vencer la tentación de la comida o la pereza. Y que mejor manera de recompensar el trabajo hecho que con una estupenda sesión de fotos, donde quede patente todo ese esfuerzo y toda esa dedicación?
Ha sido la primera parada de mi puesta a punto, pero mi entrenador y yo seguimos trabajando día a día para que en la próxima pueda ofrecer una mejor versión de mi misma. Continuo el viaje acumulando cansancio, dolores musculares, agujetas, calambres, momentos de hambre y de sed… pero todo eso no importa cuando te miras al espejo y echando la vista atrás ves todo lo que has progresado, y te demuestras a ti misma que si quieres realmente algo, con trabajo duro puedes conseguirlo.
Elvira Floría
créditos fotos fotos: angel_m modelo: Elvira Floría maquillaje y peluquería: Javier Romero localización: Gimnasio Dreamfit Zaragoza agradecimientos a Sergio Tirado por su enorme ayuda en el desarrollo de la sesión